Toronto, La Urbe Multicultural

Tal vez no exista otra ciudad en el mundo en la que los inmigrantes representen una mayoría absoluta. El 60% de sus habitantes no nació ahí y se hablan, al menos, 150 idiomas. Con más de 6 millones de habitantes, juntando su zona metropolitana, es la más poblada de canadá, un centro financiero muy importante y la que más turismo recibe al año.

- Sergio Ramos

Uno de los factores determinantes para que ésta sea una ciudad con mucha vida en sus calles es el clima. Está claro que en todo Norteamérica los inviernos son crudos y las primaveras apenas un atisbo de lo que son en México, pero por su posición geográfica Toronto es la que tiene un clima menos extremo, con temperaturas anuales que oscilan entre los 22 y los -4 grados. Si eso te parece extremo, recuerda que apenas a unos cuantos kilómetros más al norte, las temperaturas pueden descender hasta los -40 grados centígrados.

El frío y la nieve son apenas una pequeña incomodidad ante muchas otras cosas que hay que ver y hacer en la ciudad más grande de Canadá, considerada una de las más habitables del mundo por su bajo índice de criminalidad, el cuidado al medio ambiente que promueven sus autoridades y el alto nivel de vida de sus ciudadanos.

La metrópoli fue fundada por los franceses y los ingleses, pero a partir de la Primera Guerra Mundial empezaron a llegar comunidades de alemanes, italianos, rusos, chinos, polacos, indios y portugueses. Es por eso que está dividida en barrios que buscan mantener vigente la identidad cultural de cada una: Little Italy, Little Portugal, Chinatown, Koreatown, etc.

TORONTO, DESDE ADENTRO 

Para conocerla a fondo es indispensable empezar por el centro. Conocido como Old Toronto, la zona del Downtown no conserva gran repertorio de las antiguas construcciones de ladrillo que pululaban a inicios del siglo xx.

Es más bien, el distrito financiero con decenas de rascacielos entre los que permanece intacta alguna que otra casa de estilo victoriano convertida en restaurante u hotel boutique y que contrasta radicalmente con los edificios de oficinas.