MÁS DEPORTIVA - PRECIO: DESDE $363,900 POTENCIA: 93 HP PESO: 308 KG

Harley-Davidson le ha dado un buen repaso a la Low Rider. Y en esta nueva versión S ofrece un carácter más deportivo al haber modificado el motor, la parte ciclo y su ergonomía. Además, ahora la estética adopta el tono oscuro al abandonar los anteriores cromados.

- Marcos Blanco

La actual familia Softail de Harley-Davidson se encuentra más nutrida y diversificada que nunca, con una oferta que abarca desde modelos para viajar de lo más cómodo y con un original estilo clásico, hasta las custom de corte más deportivo (según los parámetros de Milwaukee) como es esta nueva Low Rider S.

Este es un modelo que vuelve al catálogo americano como modelo de la línea Softail (al desaparecer la familia Dyna hace ya tres años), y ahora emplea el singular bastidor que simula un tren trasero rígido a imagen de los modelos Hardtail de la primera mitad del siglo pasado.

Acomodados en ella, lo primero que llama la atención es cómo se acopla el asiento a nuestro cuerpo, que nos recuerda a una silla de montar a caballo. El manillar es ancho pero no resulta exagerado. Hace ya tiempo que las Harley-Davidson emplean llave de arranque remota, por lo que la puesta en marcha solo requiere accionar el conmutador del contacto y junto a éste se encuentra el de puesta en marcha (compartido con el warning).

El faro recupera la careta como en la época en que la Low Rider S pertenecía a la extinta familia Dyna y se han modificado las cotas de dirección.

Un leve toque y sus pistones de 102 mm de diámetro empiezan a recorrer sus generosas carreras de 114 mm, emanando su característico sonido proveniente de la pareja de silenciadores Shotgun, pero que no llega a resultar estruendoso de forma especial.