¿Qué pasa con mis tetas?

Emma Watson enseña un poquito y ya se le echan encima, sólo porque es feminista. Y lo mismo con Scarlett por decir que la monogamia no va con ella. Hay que saber comprenderlas.

- Kirk Royale

Llámenme loco, pero a otros los llamaron locos antes y hoy se les venera en los libros de Historia. Vale, no es lo mismo decir que la Tierra es redonda que saber que algún día Scarlett Johansson contestará mis cartas y descubrirá que el Amor es español. Ya sé que les recuerdo a Jim Carrey en 2 tontos muy tontos (P. & B. Farrelly, 1994), cuando el pobre hombre se emocionaba con aquello de que tenía una posibilidad entre un millón. Algunos nos aferramos a eso. Scarlett vuelve a estar soltera y no sólo eso, ha conmocionado al mundo (yo todavía no me he repuesto) con eso de que la fdelidad no es natural. Desde aquí te lo digo: Mi Diosa, a mí me puedes poner los cuernos todas las veces que quieras. Yo no soy como ese Romain Dauriac, de profesión dicen que periodista (esto es una señal), que se pasaba la vida ocupándose de su hija en común, Rose, y quejándose porque ella estaba todo el día de viaje, y él, con los pañales. ¡Yo limpio todos los pañales que haga falta!

Y mientras espero que Scarlett conteste mi enésima carta de amor o lea estas líneas, y fnalmente se decida, cabe celebrar que este mes la cosa vaya de mujeres, aunque también nos alteran noticias tristes y truculentas, como la confesión de Jane Fonda: la violaron a los 12 años y en una ocasión la despidieron por no querer acostarse con el jefe. Fonda se lo cuenta en una entrevista a Brie Larson, que ha sido noticia por la cara de cabreo con la que le dio el Oscar a Casey Afeck, a quien le reprocha esa fea demanda por acoso sexual que acabó solucionando con pasta de por medio.

LA CONFESIÓN DE JANE