El regreso de los 80

Hasta ahora, no nos preocupaban tanto porque regresaron suavemente, pero lo único que faltaba para revivir el look de Melanie Griffith en Working Girl eran las hombreras… y ya están aquí. ¿Alegrarnos o llorar?

- Antonio González de Cosío

Desde hace algunos años, han estado haciendo conatos de regreso en pequeñas dosis: joyería gigante, colores fosforescentes, zapatos tipo pump en tonos de impacto… Hasta aquí todo se perfilaba como pequeños detalles que daban alegría y un toque vintage a la moda contemporánea. Pero de pronto empezamos a ver en la pasarela pantalones turcos, leggings, vestidos drapeados y… prendas oversize. Desde esta temporada de otoño-invierno, un guiño icónico de la década de los 80 resurgió en la pasarela: las hombreras. Era lo único que nos faltaba para gritarlo: esta época ha vuelto. Para los millennials es excitante y novedoso. Para quienes ya lo vivimos, tiene un sabor agridulce: nos recuerda lo jóvenes que éramos, y las malas decisiones de moda que tomamos por aquel tiempo.

Por aquellas épocas

Aunque muchos diseñadores se inspiran más en otras décadas, los 80 son importantes porque fue cuando la moda se convirtió en la industria que es hoy: fue la era del boom del prêt-à-porter de diseñador. Las top models, los desfiles espectaculares, las celebridades y la prensa hacían de las fashion weeks un acontecimiento mundial. La moda se puso de moda. Y aunque estéticamente puede haber dejado mucho que desear, el estilo era valioso por su libertad, por su carga sociológica y porque la tenemos aquí cerquita. Los que pasamos los 40 la vivimos y los que tienen 20 nos vieron vivirla, cosa que la convierte en algo más familiar.

En las pantallas