La Reina Sofía ya no puede más

Sus lágrimas en un acto oficial hace unos días son el reflejo de los duros momentos que está viviendo. "A veces se siente muy sola", nos comentan desde su entorno

Lo que más le duele a doña Sofía es no tener a sus nietos a su lado ni poder verlos todo lo que le gustaría

DE ella han dicho que fue educada para ser reina y que ha cumplido su papel a la perfección, lo bueno y lo malo. Ahora, a sus 85 años (que cumple este jueves 2 de noviembre), doña Sofía, celebra su aniversario más agridulce, en un momento muy delicado en su vida.

Tanto es así que ella, acostumbrada a los envites de la vida, ha terminado derrumbándose. Hemos visto a la Reina Sofía llorando en otras ocasiones (cuando murió su suegro, don Juan, cuando perdió a su hermano Constantino...), y sus lágrimas, que ella jamás oculta, siempre nos han conmovido. También en esta ocasión.

Educada para ser reina, y consciente de su deber, doña Sofía se ha mantenido al lado de su marido en momentos difíciles.

Desconsolada 

Hace unos días la vimos en el nombramiento en Madrid de Emilio Lora-Tamayo como Rector Honorario Vitalicio de la Universidad Camilo José Cela. El físico, y expresidente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, muy delicado de salud, mantiene una estrecha relación con doña Sofía, y esta acabó rompiéndose junto a su amigo.

Pero en realidad el llanto desconsolado de la Reina, que en algún momento le impedía incluso hablar, era mucho más que la emoción del momento: era simple y llanamente la gota que colmaba el vaso.