ROCKSTAR GAMES 25 AÑOS DE PURA GENIALIDAD

Pocas editoras tienen unas señas de identidad tan definidas como las de Rockstar, cuyas artísticas y ransgresoras obras no dejan nunca a nadie indiferente

- Francisco Javier Cabal

En la actualidad, muy pocas editoras de videojuegos son tan reconocibles como Rockstar Games. No sólo ha parido algunas de las sagas más influyentes de la historia del sector, como Grand Theft Auto, sino que, además, los efectos de sus obras han sido tremendamente populares y duraderos, e imitados por muchos. Pero lo que no todo el mundo sabe es que las raíces de este coloso del entretenimiento se remontan a 1984, a Dundee (Escocia), donde a unos chalados amantes de la informática les dio por crear juegos por separado, y en distintos sistemas, para luego unirse bajo el paraguas de Acme Software. Ese nombre sólo les duró unos años, pues, en 1987, se rebautizaron como DMA Design, una denominación que se impuso a Visual Voyage y que adoptaron gracias a los manuales de Amiga y a la expresión "Direct Memory Access". AI frente de estos locos, estaba David Jones, junto con Russell Kay, Steve Hammond y Mike Dailly. Draconia fue su primer juego, que acabó siendo lanzado como Menace, bajo el sello de Psygnosis. Su moderado éxito les permitió seguir creando (Blood Money, Glancey, Hired Guns...), hasta que llegó su gran triunfo, con los suicidas Lemmings.

ROCKSTAR 

y su obsesión con los logos y las pegatinas musicales El icónico logo de Rockstar es obra del fallecido diseñador Jeremy Blake, pero la compañía ya tenía en mente como darlo a conocer, y era siguiendo el estilo de los sellos discográficos: poniéndolo en todas partes con pegatinas, una tendencia que mantiene veinticinco años después.

El culebrón de compraventas