Si hace un año te hubieran dicho que pasarías cinco meses de tu vida sin salir de tu casa, que para hacerlo el uso de cubrebocas sería obligatorio, que te tomarían la temperatura en cada lugar al que entraras, que solo por videollamadas podrías ver a tu familia y que un millón de personas a nivel mundial morirían de un virus, seguramente pensarías que estaban siendo extremistas y que nunca pasaría algo así. O mínimo que sonaba a una peli de ciencia ficción, en la cual sí o sí habría un poco de romance.
Pero, ¡oh!, no, todo es real (incluso aquella escena de “transferencia de energías sexuales” a través de un casco, entre Silvester Stallone y Sandra Bullock en Demolition Man; el sexting se convirtió en una especie de condón). Sin duda, el COVID-19 trajo un cambio en nuestra manera de relacionarnos. También, una revalorización: ¿qué humano puede vivir como ermitaño en su casa? No podemos estar eternamente aislados, ni por salud mental ni por economía. Sin embargo, necesitamos continuar cuidándonos en tanto llega la vacuna y estas son las acciones para lograr esta nueva normalidad que nos mantenga a salvo a todos:
1 USA CUBREBOCAS
Esta historia es de la edición Noviembre 2020 de Cosmopolitan en Español - México.
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