El poder femenino como ejercicio de estilo

Diáfana y sonora, la voz de las mujeres resuena en el planeta. Más allá del feminismo, se reafirma su poder profesional, creativo y emocional… y todo este movimiento encuentra en la moda a su mejor aliado.

- Por Antonio González de Cosío

Si bien es verdad que la libertad, en general, es algo por lo que jamás debiera dejarse de luchar, en el caso de las mujeres hay que hacerlo con más incisividad, con más atención a los detalles. Ya desde la Revolución francesa, pasando por las sufragistas de principios del siglo XX, se comenzó a gestar lo que se conoce históricamente como el movimiento feminista. Sin embargo, el concepto como lo identificamos hoy día nace a finales de los años 60 y se conoce como el “Nuevo Feminismo”, en el que la naturaleza del individuo –hombre o mujer– no debe condicionar su destino en la vida. “On ne naît pas femme: on le devient” (una no nace mujer, se convierte en una), dijo Simone de Beauvoir, anunciando el gran cambio que se aproximaba: libertad sexual, de expresión, de oportunidades laborales. Pero las mujeres del mundo no despertaron al día siguiente de haber quemado sus brassieres –como gran gesto liberador– y gozaron de inmediato de la igualdad por la que peleaban. No. De hecho, la lucha continúa…

VESTIDAS DE PODER