Tierra cercana

Si nos preocupamos por alimentarnos bien, hay que tomar en cuenta el origen de los vegetales que consumimos. La mejor opción es tener tu huerto en casa o comprar orgánicos. Aquí algunas recomendaciones sustentables.

- Por Pía Quintana. Fotos por Shutterstock

Mi huerto es casi una extensión de mi cocina. Muchas veces las hierbas son las M productoras de un platillo; es decir, nadie las ve, no son las actrices principales, pero sin ellas el sabor no es el mismo.

En muchos procesos agrónomos se emplean sustancias químicas (pesticidas) que pueden ser perjudiciales para tus alimentos, y el mismo sistema de transporte los y afecta. Si, por ser consciente de esto o por puro gusto, quieres sembrar un huerto en casa, toma en cuenta lo siguiente.

Primero necesitas un contenedor, de preferencia en un espacio al aire libre y con mucho sol. Puedes comenzar con macetas o huacales (de al menos 25 cm de profundidad para que las plantas crezcan con éxito) forrados con bolsas de plástico grueso.

Luego, el sustrato. Se prepara con tierra y otros componentes, como hojas secas, coco en trozos, cáscara de arroz, café molido ya procesado... Es una mezcla idónea para que las raíces de las plantas se desarrollen. Ojo: no compres tierra negra en viveros informales: puede ser de origen clandestino.

Y, ahora sí, a germinar y empezar con tus plantas, que primero serán plántulas. Puedes comprar, recolectar o intercambiar semillas nativas o ecológicas en tiendas o cooperativas de producción. Corrobora que las semillas no hayan recibido ningún tratamiento con agroquímicos.

CUIDA TUS PLANTITAS