María Teresa Campos allegados: preocupa a sus se niega a recibir visitas

Su entorno está muy alarmado por el hecho de que la presentadora, cuyo estado de salud es delicado, se esté aislando cada vez más

Gustavo, con mucha mano izquierda, es muchas veces quien consigue convencer a María Teresa para salir a dar un paseo en coche o jugar a las cartas.

DURANTE toda su vida ha sido una mujer muy activa, llena de vida, conuna energía que parecía prácticamente inagotable. Quizá por ello, a su entorno más próximo le cuesta tanto asimilar el estado en el que, a sus 81 años, María Teresa Campos se encuentra en la actualidad. Y no nos referimos solamente al estado físico, que ha sufrido un deterioro importante en los últimos meses, tal y como han confirmado sus dos hijas, Terelu Campos y Carmen Borrego, sino también al emocional y anímico. "Teresa nos tiene muy preocupados. Ella siempre ha sido una persona muy sociable, a la que le encantaba recibir a sus amigos en casa, organizar comidas y cenas y ahora no quiere ver a nadie. Ni siquiera le apetecen las partidas de cartas con sus amigas de siempre, que antes eran sagradas. Aunque en los últimos tiempos, estaba más bajita de ánimo, hasta hace poco, Teresa nunca se había negado a recibir visitas y mucho menos a jugar su partida de cartas que tanto le entretenía. La verdad es que no tiene ganas de nada y nos preocupa porque el ánimo es fundamental para la salud en general", nos cuenta una fuente muy allegada a la querida presentadora.

Alejandra Rubio compartió recientemente esta entrañable imagen charlando con su querida abuela.

"Antes le encantaba recibir a amigos en casa y ahora no quiere ver a nadie. Ni siquiera le apetece jugar a las cartas"

Sus hijas la animan