Elefantes

Volar para saltar el abismo que separa a hijos de padres

- Janet Gomez

Producto de un trabajo colectivo que lleva casi dos años y dos exitosas temporadas, Cristian David y Fernando Ro-jas vuelven a traer a escena Elefantes, una puesta para toda la familia que aborda un tema relevante: cómo aprender a volar para saltar el abismo de incomunicación que separa a hijos de padres, y viceversa.

Inspirado en la propia relación con su padre, Cristian David escribió un relato donde padre e hija emprenden un viaje para desentrañar secretos y romper las barreras que los han separado largo tiempo.

La trama se enfoca en un viejo piloto de globos aerostáticos encallado, y quien, a la llegada de una inesperada pasajera, cambia su vida y le da un pretexto para que logren reconciliarse con un pasado que los ha unido toda la vida.

“La metáfora del globo aerostático abandonado y puesto en un lugar en la nada, refleja la ingenuidad de los seres humanos; de cómo nos cuesta mucho comunicarnos con los demás. La comunicación entre padres e hijos es una de las más complicadas, porque además de que es muy cercana, es un vínculo muy estrecho; y conocer a la otra persona, hace que tengan muchas armas para hacer daño. Ese daño muchas de las veces se hace sin querer y pensando en que se hace lo mejor”, explica Fernando Rojas, co-director del montaje.

Para darle vida a esta travesía, los creativos idearon un espacio onírico donde la escenografía, el vestuario, la música de Juan Pablo Villa, la iluminación y el diseño sonoro, llaman la atención de toda la familia; aunque en un principio, el montaje sólo se había pensado para adolescentes y adultos.