Marina de Tavira – Verdad INFINITA

El olor que permea sobre todo el lugar, junto al implacable verde cannabis, se convierte en escenario y antagonista de la portada de Marina de Tavira, quien nos incita a comenzar la conversación inteligente

- Por Kira Álvarez

Una historia de portada que parece inmejorable. Todo se acomodó –por destino– para que, agendas, personajes, locación y misión se conjugaran en una misma tarde, de pleno otoño, en Los Ángeles, California. Marina de Tavira puede parecer una apuesta obvia –o tal vez no, en muchos– para protagonizar la primera portada de una revista femenina que se enfoca, en su totalidad, al cannabis y a su legalización en México. Marina nos parece perfecta por muchas razones. Es pionera, valiente con su discurso, articulada en sus opiniones y, luego de conocerla, agregaría: de inteligencia acertada con una mística incorpórea. Todo a su alrededor parece abatirse para caer donde siempre debió estar. Incluso estas fotos, la facilidad y marcada fluidez para lograrlas pareciera ser un plan maestro que Marina –con su magia– ya había orquestado desde antes. Un clima ideal, el invernadero de Rincón Frams conquistado por plantas de cannabis en sus diferentes etapas de germinación, un equipo alucinado por estar en un lugar que, para todos, era la primera vez que experimentábamos casi con el mismo sentir que provoca una travesura infantil. La conversación empieza con la misma libertad con la que Marina se mueve por la vida.

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