LA FAMILIA MUÉGANO

A diferencia de muchos royals, los Grimaldi han permanecido juntos y se apoyan siempre, incluso, en sus peores momentos y escándalos.

- SANDRA MENESES

Los Grimaldi, en una foto como la de cualquier familia, con papás, tíos, nueras y primos: (de izq. a der.) Andrea Casiraghi, Tatiana Santo Domingo, Pauline y Louis Ducruet, Estefanía, Alberto, Carolina de Mónaco y Camille Gottlieb.

Aunque sus compromi-sos hicieron que Grace y Rainiero de Mónaco confiaran el cuidado de sus tres hijos a un equipo de niñeras, al final realizaron un buen trabajo con ellos. Más allá de los escándalos juveniles de Carolina y Estefanía, o de los rumores que no dejan en paz a Alberto debido a su matrimonio con Charlene, los hermanos siempre se han mostrado unidos. Y eso, por supuesto, lo han sabido transmitir a sus respectivos hijos.

Es bien conocido el distanciamiento entre el rey Felipe V con sus hermanas Elena y Cristina, y recientemente el de los príncipes William y Harry. Nos referimos a ellos porque pertenecen a las familias reales que han pasado por los mayores escándalos en los últimos años, como los Grimaldi. La diferencia con estos últimos es la unión que suelen mostrar en público.

GOLPE BRUTAL

Todo comenzó el 14 de septiembre de 1982, cuando falleció la princesa Grace en un accidente. Ella manejaba y en el asiento del copiloto viajaba su hija menor, Estefanía. Esto desató uno de los más grandes chismes de la realeza contemporánea: se dijo que la joven iba al volante y que ambas discutían.