Otro camino hacia la felicidad

Esta es la historia de Frida, llena de desafíos, ruptura de paradigmas y grandes esfuerzos que vivió, con base en el amor, para alcanzar su sueño.

- Por Cecilia Morales Andere

Mayo se reconoce a nivel global como el mes para festejar el Día de las Madres.

Lo que podría parecer algo realmente sencillo y normal, en sincronía con el ciclo de la vida, como es la maternidad, “puede convertirse en una situación estresante y llena de emociones, a veces satisfactorias y otras no tanto: visitas constantes al doctor llenas de inyecciones y ultrasonidos hasta que el cuerpo dice: ‘ni una más’”.

Frida pensó que su historia iba a ser como siempre la imaginó: estudiar, conocer al hombre de su vida, casarse y formar una familia. Todo iba bien, el área de los estudios y la parte profesional se perfilaban hacia el éxito. A ella lo que más le gusta es viajar, por lo que comenzó a organizar sus propias experiencias y a perfeccionarlas de manera particular para ofrecerlas a sus conocidos, hasta que de regreso de un viaje a Tailandia, al aterrizar en San Diego, lugar en el que reside, se dio cuenta de que era momento de hacer realidad otro deseo.

“Si compartir mi historia sirve para ayudar a que otra mujer sepa que se puede cumplir con el sueño de la felicidad, vale la pena abrirla y darla a conocer”, confiesa

CAMINOS ALTERNOS

Frida siempre supo que deseaba formar una familia. Gracias a que sus dates no fueron lo que ella buscaba en un hombre como pareja, tenía claro que el camino para realizar su sueño era una fertilización in vitro (IVF, de aquí en adelante).