El Mini Punto Rojo De Avistar

Estamos en plena temporada de monterías, y somos legión los que durante los próximos meses pasaremos en más de una ocasión por el deseado y preceptivo ritual del sorteo de puestos; quizás nos toque el del balcón de la cuerda, o el cierre del sopié con vistas ya a las tierras de labor, ambos con tiraderos amplios y largos, pero quizás la diosa Fortuna nos obsequie con el último puesto de la Traviesa de las Cerradas, donde raro es el año que no se lía parda con los cochinos.

Y para esos puestos cerrados, sucios, con tiraderos me-dios o cortos, nada como los cada vez más utilizados puntos rojos, diminutos visores que pasaron hace mucho del terreno militar y policial al cinegético, y que merced a su simplicidad de uso, tamaño reducido, peso casi inapreciable y –porque no decirlo- precio ciertamente asequible, se han hecho un hueco entre los cazadores, y más concretamente entre los aficionados a los ganchos y batidas.

AV20

El AV20 de Avistar es el perfecto ejemplo de ello; mide apenas 7 centímetros de largo por 5 de alto, y pesa 80 gramos, y es tan compacto como robusto. Su estructura cerrada, de tubo, lo hace más sólido que los ya de por sí sólidos puntos rojos de pantalla; es indestructible, y huelga decir que es impermeable y antiempañamiento, como cualquier óptica deportiva que se precie.