Miedo – A la muerte (Tuya o de alguien más)

Lo único que tenemos que hacer antes de vivir es morir. Vivir con miedo a morir es un estado de media vida. No es vida.

- Por Gaby Pérez Islas

Desde la cabeza, en frío, muchos dicen no temerle. Responden que a todos nos llegará la hora, que la muerte es simple porque es inevitable. Pero si la pregunta se plantea de forma distinta, por ejemplo, ¿temes la muerte de un ser querido?, la cosa cambia. En ese punto ya no contesta el cerebro sino el estómago, con un sí rotundo, porque detrás del miedo a morir se esconde el miedo a sufrir. Asusta más el cómo me voy a morir y si incluirá sufrimiento, que la muerte en sí misma. Alguna vez un periódico nacional hizo la siguiente encuesta: si le dijeran, querido lector, que va a morir, pero que no le va a doler, y que, además, podrá ver lo que hay del otro lado y regresar, ¿moriría? Alrededor de 80 por ciento dijo que sí.

Esto prueba dos cosas:

1. Que el mexicano es muy curioso.

2. Que más que miedo a la muerte le tememos al có mo llegará esta.