EL CONDE Y LA CONDESA LEPIC NOS ABREN LAS PUERTAS DE SU HISTÓRICO CASTILLO EN NORMANDÍA, UNA ANTIGUA FORTALEZA CONSTRUIDA HACE OCHO SIGLOS PARA RICARDO CORAZÓN DE LEÓN

Nos hablan de la restauración que están realizando para devolverle su grandeza

- VICTORIA DE ALCAHÚD

ELÉONORE de Boysson y Jean-Ghislain Lepic se encontraron —casi adolescentes— un comienzo de año. Vivieron una deliciosa historia de amor que duró hasta la llegada de las vacaciones de verano. Siguiendo cada cual a su familia, se separaron. Y con la misma facilidad con la que había surgido, la relación… se diluyó.

Volvieron a verse años después, ambos casados, cada uno con sus respectivas familias, de forma casual, en Londres. Apenas un «hola, ¿qué tal?», y de nuevo sus caminos se separaron. Hasta que, 20 años más tarde, una amiga común decidió organizar una cena en su casa para diez amigos y amigas solteros.

Sobre estas líneas y abajo, fachada principal y lateral del castillo de Louÿe. Rodeado en primer término de unos sencillos y elegantes jardines, la propiedad continúa al fondo con 300 hectáreas de bosque. A la derecha, junto al Mercedes «vintage», parte de la gran familia que forman Jean-Ghislain Lepic y Eléonore de Boysson, conde y condesa Lepic. De izquierda a derecha Hortense, la benjamina, todavía en el colegio; le sigue Clémence, productora del «podcast» «Génération Do it Yourself», el programa de «business»> más famoso de Francia; y Axel, que estudia en la prestigiosa universidad de Berkeley (California)

Levantado en 1180, el Château de Louÿe lleva en la familia de Jean-Ghislain Lepic desde 1882, cuando lo adquirió su antepasado Charles Edouard de Viel-Castel