Las hermanas Dulce y Olga Álvarez renovaron el negocio familiar de reciclado de llantas. Aumentaron sus ventas y lo transformaron en una empresa verde.
Granutec, la nueva línea creada por Dulce y Olga Álvarez, aporta 60% de los ingresos de la empresa familiar. Otro 20% proviene de la proveeduría a peleterías y reparadoras de calzado. El resto, del triturado del hule para canchas, adoquines y gimnasios.
El de Olivia Espinosa y José Álvarez fue un matrimonio por amor y por negocios. En 1959, la pareja oriunda del barrio de Tepito, en la Ciudad de México, unió sus talentos: el de ella, en la peletería y reparación de calzado; él, como proveedor de suela de caucho que separaba de las llantas. En 1970 añadieron el acopio y bautizaron el negocio como Central Hulera Álvarez.
Su hijo Manuel continuó la tradición. Tenía dos peleterías y proveía de suela de caucho a más de 1,000 clientes, además de seguir con el acopio de llantas. El crecimiento obligó a buscar más espacio y, a finales de los 80, abrió una planta en un edificio de tres pisos en Ecatepec, Estado de México. Ahí le alcanzó la ola de zapatos de China, que afectó a la industria en la primera década del siglo XXI. Conservó 300 clientes.
“La gente prefería usar tenis de 250 pesos que un huarache más caro, aunque le durara 10 años”, indica Dulce Álvarez, hija de Manuel y ahora directora de la empresa. Ella y su hermana Olga tomaron las riendas en 2008. La tercera generación comprendió la necesidad de reinventarse.
This story is from the Abril 2019 - 278 edition of MANUFACTURA.
Start your 7-day Magzter GOLD free trial to access thousands of curated premium stories, and 9,000+ magazines and newspapers.
Already a subscriber ? Sign In
This story is from the Abril 2019 - 278 edition of MANUFACTURA.
Start your 7-day Magzter GOLD free trial to access thousands of curated premium stories, and 9,000+ magazines and newspapers.
Already a subscriber? Sign In