En sus marcas, listos... Pokémon GO!

Los videogamers que se la pasaban en el sótano pegados a la consola o la computadora, abandonaron su encierro para salir al mundo real en busca de una criatura virtual llamada Pokémon. Caminando con la vista en sus smartphones, recorren parques, universidades, tiendas, calles, museos, panteones, zoológicos y playas en todas partes del mundo. Haremos un recuento de los aspectos más interesantes sobre este fenómeno que se ha convertido en el videojuego móvil más exitoso de la historia.

- Por Alberto Ortega Gurza

Pokémon Go es una sensación internacional. Entre otras nove-dades sorprendentes, mezcla el entorno real con criaturas y otros elementos virtuales. El juego con-siste en localizar y capturar el mayor número posible de Pokémon de distintos tipos. Entre más raros y difíciles de encontrar, mejor, porque son más codiciados y valen más.

Con el teléfono en la mano, los usuarios se olvidan de la clásica consola de videojuegos y salen de su retiro. Dejaron de ser las personas ocultas, sedentarias, antisociales y ensimismadas, para convertirse, bajo la luz del sol o de la luna, en personas activas y sociables que interactúan en el mundo real.

GO MAGIC

La app hace uso del GPS y de la cámara del dispositivo móvil para ver el panorama. Cuando un Pokémon está cerca, el teléfono vibra o suena. Al ubicarlo, en la pantalla aparece su imagen superpuesta sobre el paisaje real captado por la lente. Para hacerlo suyo, el jugador debe ser capaz de capturarlo. Esta imagen de lo real con elementos de ficción, genera una nueva dimensión llamada ‘realidad aumentada’.

En lugares públicos donde hay acción, lo que se ve a simple vista es un montón de nerds, fresas y hipsters caminando sin rumbo fijo, mirando sus teléfonos. Pero es mucho más que eso. El juego está cambiando radicalmente las cosas; no sólo porque rompe todos los paradigmas del entretenimiento digital, sino también porque está en vías de provocar un estrepitoso sacudimiento en la economía de la esfera tecnológica.