Objetivo Verano A Los Guarros En Aguardo

La primavera ha tocado a su fin y el verano dejó de llamar a la puerta con insistencia para instalarse definitivamente entre nosotros. Los tonos verdes, hace poco generalizados en nuestros campos, sólo se mantienen en aquellos enclaves con una cierta humedad y son los amarillos los que imponen su ley sobre el paisaje. Y es en estas semanas de arranque del estío cuando muchos, que hasta ahora han andado inmersos en otras modalidades venatorias tras diferentes especies o que simplemente han permanecido en el dique seco después del cierre montero, vuelven la vista al jabalí y comienzan a preparar su temporada de esperas nocturnas veraniegas.

Los corzos, al menos hasta que comiencen a manifestarse los pri-meros síntomas del celo este mes, ya han dado lo que tenían que dar y es lógico que aún se muestren reservados y cautelosos. Los encuentros con los cazadores han resabiado a los machos que no han sido abatidos y además se intuye la proximidad del celo, por lo que es natural esa especie de desaparición de los corzos de nuestros cazaderos hasta mediados de mes, y también el retiro de numerosos corceros a la espera de mejores opciones para sus recechos y aguardos en próximos días o semanas.

A partir de la información inicial y para profundizar aún más, nada mejor que el uso de las trail-cams, las cuales situaremos en escenarios estratégicos y nos ayudarán a tomar las decisiones más trascendentales del aguardo.

MANDAN LOS AGUARDOS

Comentado lo anterior y si exceptuamos algún que otro rececho de muflón o rebeco, el resto de alternativas en lo tocante a la caza mayor nacional prácticamente quedan circunscritas a las esperas nocturnas a los jabalíes, modalidad cinegética que siempre gozó de una gran popularidad entre los aficionados cochineros y que ha visto cómo su nómina de practicantes no ha parado de crecer en los últimos años, lo mismo que la literatura venatoria centrada en la misma, como ha quedado patente en páginas anteriores con la fantástica trilogía del aguardista José Murillo Sánchez (‘Jabalíes a la espera’) que estamos repasando estos meses.

Imagen de un buen guarro tomada por una trail-cam en una noche veraniega.