Luca Nichetto - Ahora

El Diseñador Italiano Desafía Aquel Pensamiento De Que El Futuro, Hasta Que Llega, No Le Pertenece A Nadie. Suyo Es Ya El Presente, Imaginemos Lo Que Está Por Venir
 

Dejó escrito un poeta romántico enamo-rado de Venecia que la vida es “co-mo una cúpula de cristales multicolores”. Y Luca Nichetto, que nació en la mismísima isla de Murano –donde trabajaban el vidrio su abuelo y su madre–, lo suscribiría sin dudar. Esta entrevista se realizó a través del cristal de una pantalla, y no podía empezar en otro lugar.

Gèmo. La colección de luminarias para la firma española Parachilna, uno de sus últimos trabajos.

Naciste en Murano, estudiaste en Venecia y trabajas a caba llo entre Estocolmo y la ciudad de los canales, de forma que reúnes dos grandes tradiciones: la italiana y la escandinava…

Creo ser un diseñador 100% italiano. Ahora, dicho esto, es cierto que la tradición escandinava ha permeado en mi visión desde que vivo y trabajo aquí. Es normal. He cambiado mucho en estos diez años: durante la primera etapa de mi carrera, como todo joven diseñador que empieza –pero aún peor siendo italiano–, estaba obsesionado con crear un icono. La presión era fortísima. Desde que me mudé a Estocolmo me siento más ligero; ya no busco iconos sino productos que me complazcan totalmente. Y te diré otra cosa: es cierto que la etiqueta ‘diseño italiano’ ha funcionado a la perfección internacionalmente como garantía de excelencia, pero si pienso en la mentalidad nórdica –y particularmente en su culto a la funcionalidad–, esa sí que es una idea global.

“EN EL MOMENTO QUE VIVIMOS, PARA ESTABLECERSE Y COMPETIR, ES IMPRESCINDIBLE PENSAR GLOBALMENTE”