Hace casi un año, una serie de imágenes delataban la cruda realidad que se vivía en Sonora. Fotografías de ganado desvanecido encima de terrenos áridos se convirtieron en el lugar común cuando se hablaba de la falta de lluvia que vivía el estado.
Era junio y, de sus 72 municipios, 38 padecían una sequía severa, 21, extrema, y 13, moderada, según reportes del Monitor de Sequía del Sistema Meteorológico Nacional. Ahora, a unos meses de distancia, el estado es símbolo de una promesa por partida doble: la de extracción de litio y la creación de un hub industrial en donde se fabricarán baterías eléctricas y se ensamblarán autos.
El llamado Proyecto Sonora, que se ha colocado a la cabeza de los planes presidenciales y se ha enmarcado en lo que parece una nueva dinámica industrial con Estados Unidos, se está erigiendo en un terreno en donde las sequías apremian.
Nadie sabe de dónde se obtendrán los recursos hídricos para llevar a cabo los planes. José Alberto Burquez, doctor por la Universidad de Cambridge e investigador del Departamento de Ecología de la Biodiversidad de la UNAM, responde con un "no" rotundo cuando se le pregunta si en el estado hay agua suficiente para llevar a cabo el plan que pretende aprovechar el momento que ha traído la electromovilidad y la relocalización de las cadenas de suministro.
This story is from the Abril 2023 - 1302 edition of EXPANSIÓN.
Start your 7-day Magzter GOLD free trial to access thousands of curated premium stories, and 9,000+ magazines and newspapers.
Already a subscriber ? Sign In
This story is from the Abril 2023 - 1302 edition of EXPANSIÓN.
Start your 7-day Magzter GOLD free trial to access thousands of curated premium stories, and 9,000+ magazines and newspapers.
Already a subscriber? Sign In