ALICIA VIKANDER - PURA ALEGRÍA

SU RISA EN CASCADA ES CONTAGIOSA. ACTRIZ Y ROSTRO DE VUITTON, NOS HABLA DESDE INGLATERRA DE GLORIA STEINEM Y EL FEMINISMO, DE SU PADRE PSIQUIATRA Y SU MADRE ACTRIZ, ANTES DE VOLVER A LISBOA, DONDE VIVE CON SU MARIDO, EL ACTOR MICHAEL FASSBENDER. ALICIA VIKANDER AMA EL MOVIMIENTO DE LA VIDA Y EL SUSURRO DE LA EXISTENCIA.

- Fabrice Gaignault

Alicia está en el coche. Realmente, ¿alguna vez se baja de uno? Hace poco más de un año, en una entrevista anterior, nos encontramos en una situación similar en otro vehículo en Nueva York con el ruido de fondo de sus monstruosos embotellamientos. Hoy en Inglaterra parece que el tráfico, al menos por el ruido, es bastante más tranquilo. La actriz sueca, que también es embajadora de Louis Vuitton, es una ciudadana del mundo, por el que se mueve sin fin, desde una película de terror ambientada en Japón, La música del terremoto, hasta una película biográfica en los Estados Unidos para retratar a la joven feminista Gloria Steinem. Es fácil imaginar que después de Inglaterra, viajará de nuevo para reunirse con su marido, el actor Michael Fassbender, en su casa en Lisboa, una ciudad donde todos los dejan tranquilos y de la que aman su belleza tranquila y algo melancólica. Alicia Vikander tiene una conversación fluida, una risa contagiosa y una hermosa despedida.

De su colaboración con Louis Vuitton se aprecia una gran complicidad y amistad con Nicolas Ghesquière...

Sí, adoro al hombre y a su ropa. Sus creaciones son como armaduras, me protegen y me ayudan a ser fuerte. Su ropa me da poder y confianza.

Nicolas Ghesquière ha declarado que lo que le gusta de ti es que no te comprometes. ¿Pero eso es posible? Cada uno de nosotros debe, para vivir o sobrevivir, hacer compromisos, ¿verdad?

Sí, estoy de acuerdo contigo. ¡No creo que esté a la altura de tal cumplido! (Se ríe). Todos estamos obligados a hacer compromisos. Lo más importante es no negar quién eres. Es imposible avanzar en la vida sin aceptar esta idea.