Consejos para correr los 10K

Ya sea que necesites un nuevo reto, o nada más quieras mejorar en tu distancia favorita, el 10K es para ti.

- Por Matt Gilbert. Traducción: Eduardo Fernández

Los 10K son una distancia que da y da. Basada en la tríada sagrada del entrenamiento de fondo: resistencia, fuerza y velocidad, la preparación para esta carrera provee la base para competir en varias distancias. Claro que puedes enfocarte solo en tu meta de los 10 kilómetros, pero también tomar esta prueba para afinar cualquier distancia, desde un 5K hasta el maratón. Cuando entras a los 10K te sumerges en una tradición casi mítica. Estamos hablando de la distancia del fondismo clásico, hecha famosa por atletas sublimes como Kenenisa Bekele y Haile Gebrselassie. Ambos reconocerían que sus asombrosos desempeños, con marcas mundiales en los 5,000 metros y en el maratón, se deben a su compromiso duradero con los 10,000 metros. Un gran atleta de 10K se puede convertir en un corredor todoterreno, aquí te decimos cómo aprovechar el poder del 10K.

1. INCREMENTA TU RITMO (LA CARRERA TEMPO)

Sesiones “límite”, de tempo o ritmo son cruciales para la preparación de un 10K. Este tipo de entrenos preparan a tu cuerpo a conservar una determinada velocidad durante toda la distancia. ¿Cómo? Al elevar tu umbral anaeróbico: el punto en el cual el nivel de lactato en la sangre se dispara, antes de que empieces a jadear y tragar aire para detenerte por completo. Sesiones frecuentes a un paso menor que tu ritmo de competencia en 10 kilómetros, es decir, una carrera tempo, pueden mejorar de manera significativa tu resistencia y eficiencia de carrera en únicamente 6 semanas.