LA SEGUNDA VIDA DE LOS ALIMENTOS

ESTAS STARTUPS MEXICANAS ESTÁN DANDO LOS PRIMEROS PASOS PARA COMBATIR EL DESPERDICIO DE COMIDA A NIVEL LOCAL.

Más de 829 millones de personas en el mundo se acuestan con hambre cada noche. Cada día, toneladas de alimentos no llegan a la población que los necesita. En contraste, toda esta comida, que es apta para el consumo, se desecha conscientemente. Este desperdicio, que se produce en todas las fases de la producción (desde el campo hasta la distribución, los minoristas y el consumidor), se debe a una amplia gama de razones sin relación a su frescura o calidad nutricional.

Hoy, un jitomate puede ir directamente a la basura porque no tiene el tamaño ideal que exigen los supermercados o los restaurantes; un plátano puede desecharse porque ya no forma parte de una penca; una naranja, porque su cáscara está quemada por el sol o no tiene el color adecuado; mientras que una zanahoria puede desecharse porque muestra protuberancias. Y todos pueden estar en perfecto estado para su consumo. Y, no son pocos: son toneladas de alimentos los que se tiran por estos motivos.

Aproximadamente un tercio de los alimentos producidos para consumo humano en el mundo, es decir, unos 1,300 millones de toneladas, se pierden o desperdician cada año, revelan datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Estas pérdidas de alimentos ascienden a unos 680,000 millones de dólares (mdd) en los países industrializados, y a 310,000 mdd en los países en desarrollo.

En México, según el Banco Mexicano de Alimentos (Bamx), se desperdicia un tercio de los alimentos producidos, lo que equivale a 38 toneladas por minuto, que alimentarían a 25.5 millones de personas necesitadas.