Maestros De La Humanidad

Representados por figuras híbridas de hombre y pez, estos entes de la mitología mesopotámica surgieron de las aguas para crear civilizaciones.

- Luis Felipe Brice

Mesopotamia, cuna de la civilización, tiene en los Siete Sabios a las criaturas mitológicas que transmitieron el conjunto de cono cimientos que propiciaron el desarrollo de la humanidad. En lenguas antiguas, esos sabios eran llamados Apkallu o Abgallu. Se les representaba como hombres-peces que habían surgido de las más profundas aguas (Apsú, presumiblemente el actual golfo Pérsico) con información crucial que, por designio divino, debían compartir con los mortales.

Según consta en fuentes halladas en es critura cuneiforme, el dios sabio Enki había decidido que los humanos cultivaran la tierra para obtener su sustento y pudieran así servir a los dioses. Sin embargo, los hombres no sabían cómo hacerlo. A decir de los historiadores, se trataba de los pue blos primitivos cuya existencia nómada se basaba en la caza y la recolección. Por ello, Enki envió a los Apkallu para que les enseñaran no sólo a practicar la agricultura, sino también a elaborar las herramientas y utensilios para su vida cotidiana, y a construir sus viviendas, templos y ciudades. Asimismo, para que aprendieran a registrar su devenir en tablillas de arcilla (escritura cuneiforme); fomentar diversas artes, oficios y ciencias, y establecer códigos de conducta, entre otras tareas para lograr una supervivencia civilizada.