MAURICIO WIESENTHAL «Sin diferencias no puede haber libertad»

Este hombre de increíble erudición, de cultura infinita-pero como la que no tiene hoy casi nadie: una cultura activa, crítica, punzante, que interpreta el pasado y lo convierte en reflexión del propio presente-, Mauricio Wiesenthal (1943), vuelve a la acción con otro libro asombroso, valiente, extremadamente interesante, profundo, con el que provocará nuestra conciencia. Solo este escritor barcelonés de ascendencia germana, con toda su andadura independiente y viajera, podía haber escribir un libro como El derecho a disentir.

- TONI MONTESINOS

Ensayos punzantes, que mezclan biografía, análisis de nuestra realidad, crítica cultural, erudición histórica..., que buscan ubicarse en lo que el autor llama en diversas ocasiones lo «intempestivo», es decir, como dice la RAE, «que es o está fuera de tiempo y sazón». Wiesenthal es el rebelde que no huye cada segundo de lo acomodaticio y consabido, que nos llama a horas intempestivas para empujarnos a pensar en lo que hacemos y lo que pensamos, en lo que sabemos en definitiva, y que bucea donde nadie se atreve, analizando con una audacia incomparable nuestro mundo hoy en día, regido por el materialismo vacuo y lo frívolo-instantáneo. Henry David Thoreau decía que «sólo uno en un millón está lo bastante despierto para el ejercicio intelectual efectivo, sólo uno en cien millones, para una vida poética o divina». Wiesenthal -un faro en los principios de integridad e independencia, una de las escasísimas autoridades morales que tenemos entre nosotros, es ese individuo único; el mismo que ha recuperado con sus libros el espíritu de la vieja cultura europea. El sabio inconmensurable con el que dialogamos ahora.

> ¿Qué es El derecho a disentir? ¿Una autobiografía intelectual, una revisión de sus vivencias remotas, una reflexión sobre nuestra atmósfera cultural, una crítica a la actualidad? ¿Es todo eso, cómo concibió el libro?

Ante todo, pretende ser un juego para el espíritu, si me permite alegar que un juego es lo más serio que podemos crear los seres humanos. El lector puede disfrutarlo como una misteriosa máscara que nos permite hablar de la fascinante comedia humana. Y podría ser también una «correspondencia entre el hoy y el ayer».