NUESTRA CONEXIÓN CON LAS TORTUGAS

México es el país con el mayor número de especies de tortugas marinas, para fines de crianza, tránsito o alimentación, mientras que Nayarit alberga algunas de las zonas de anidación más importantes del país para estos reptiles.

- MARIANA MIJARES*

Sin los campamentos de protección de tortugas, muchas ya habrían desaparecido.

* Agradecemos a la Oficina de Visitantes y Convenciones de Riviera Nayarit (OVC), al Centro de Protección y Conservación de la Tortuga Marina, al Campamento Platanitos y al hotel Four Seasons Resort Punta Mita la información proporcionada para este artículo.

Cada verano, las hembras adultas salen a desovar en el Pacífico mexicano (entre julio y octubre). Luego, de septiembre a noviembre, se dan los procesos de liberación de las crías, en los que podemos participar, pero siempre apoyados por los responsables de los campamentos tortugueros, encargados de la protección y conservación de las tortugas marinas.

Las tortugas pasan la mayor parte de su vida alimentándose en mar abierto y manifiestan tendencias a migrar en grandes grupos. Se esconden entre algas, troncos, basura o en cualquier lugar que les brinde seguridad.

Dado que en la actualidad las playas han sido invadidas por el turismo, cada vez resulta más necesario orientar y educar acerca de las tortugas, y, sobre todo, aprender cómo podemos contribuir a su conservación.

LA VIDA DE UNA TORTUGA

Cuando nacen y dan sus primeros pasos sobre la arena, antes de adentrarse en el mar, las tortugas hacen una “impronta”. Mediante este proceso, y una vez que han madurado sexualmente (les toma desde ocho hasta 20 años, dependiendo de la especie), regresarán a esa misma playa a poner sus huevos.