Nuevos aires

Más allá de su asombrosa transformación física, en la que perdió 45 kilos, Adele sufrió una metamorfosis para demostrar que, sin importar cómo luzca, ser fiel a sí misma y cuidar su integridad es el secreto de la plenitud.

- CAROLINA M. PAYÁN

Una voz profunda y prodigiosa es lo primero que viene a nuestra mente cuando pensamos en Adele, pero no la historia de fondo detrás de sus canciones, que dejan ver a una mujer fuerte que ha luchado con un pasado doloroso plagado de desamores, bullying y ansiedad, y es que para la ganadora de 15 premios Grammy, el éxito ha estado vinculado con matices agridulces. “Cuando tuve en las manos el Oscar por ‘Skyfallʼ (banda sonora de James Bond), lejos de compartir mi alegría por el máximo premio, muchos me juzgaron porque mi vestido me hacía lucir voluminosa”, expresó en el show 60 Minutes Australia. Años después ha puesto fin a los comentarios agresivos al confiar en un grupo de expertos que la ayudó a evolucionar con un único objetivo: nutrir su vínculo con el amor de su vida, su hijo Angelo.

Así, tras un matrimonio conflictivo que terminó en un divorcio millonario, su próximo material discográfico, en el que ha volcado su corazón, “refleja la importancia de ese renacimiento personal de modo íntegro”, como ella misma ha revelado.

En 2013 ganó un Oscar por Mejor canción original gracias a “Skyfall”.

Con su ex, Simon, con quien comparte la custodia de su hijo.

Ser mamá te transforma