Rías Baixas

Una denominación en constante evolución.

- María Forcada

RÍAS BAIXAS ES, SIN DUDA, la denominación de origen que cautiva el mercado nacional e internacional aumentando su producción y exportación como nunca antes había sucedido. Sin embargo, D. O. Rías Baixas lucha por enseñarle al mundo que es mucho más que albariño, controlar los precios y nivelar unas temperaturas cada vez más altas en las subzonas de mayor producción.

La Denominación de Origen Rías Baixas es una pequeña zona del noroeste de España en la que 5,143 viticultores, más de 170 bodegas y 5 subzonas mantienen una tradición milenaria basada en la viticultura tradicional y el cultivo de variedades autóctonas, que evoluciona hacia una tendencia de vinos criados sobre lías y en barrica.

Las subzonas que integran esta D. O. son: Condado do Tea, Val do Salnés (la de mayor superficie y número de bodegas), Soutomaior, O Rosal y Ribeira do Ulla. Y en cada una de ellas existen diversas variedades de uva: loureira, treixadura o caíño blanco y tintas, como la caño tinto, espadeiro o sousón. Aunque sin duda la blanca albariño lidera la producción (96%), es importante entender que las demás variedades están influyendo en las nuevas tendencias de consumo. Además, cada subzona tiene una normativa distinta a la hora de utilizar sus mezclas, y diferentes climas y suelos, lo que confiere una personalidad diferente a cada vino.

Otro dato importante es que la mayoría de los viñedos son cultivados en parras en lugar de espalderas, una tradición que poco a poco está cambiando en pro de la mayor producción y recolección más cómoda al poder usar máquinas de recogida de la uva, más rápidas y precisas.