Las finanzas de los Royals en crisis

Cuando los parlamentos reducen el presupuesto de la monarquía tiene lugar una revolución en favor de la transparencia. Y lo que cada Casa Real recibe hoy es motivo de rumores y temor al interior de los palacios.

- Por Mari Rodríguez Ichaso

La noticia fue un bombazo: cuando en Suecia el rey Carlos XVI Gustavo suprimió a cinco de sus nietos su derecho a ser “mantenidos” por la Corona, otras dinastías temblaron. ¿Acaso comenzaría un efecto dominó? Y lo más preocupante: si en la siempre pacífica y serena Suecia fue el propio gobierno el que exigió semejante medida, es posible que otras naciones sigan su ejemplo. Y es que el sustento de la monarquía proviene de los impuestos del pueblo, lo cual constituye un problema porque los ciudadanos, hartos de ver subir sus contribuciones, quieren saber cómo las administran sus soberanos. Y mientras algunas casas reales ajustan sus ‘sueldos’ y aceptan sin chistar los cambios, ¡otras se indignan y no temen protestar!

Es cierto, la vida en los palacios no es como antes, y hasta en los más opulentos los administradores saben que es preciso ahorrar. En la mayoría de las cortes hay nuevas regulaciones y se han reducido los caprichos de los royals, lo vimos con el viaje en avión privado a Niza realizado por el príncipe Harry y Meghan Markle, ¡las críticas fueron ensordecedoras y con justa razón! Y a pesar de las medidas de austeridad anunciadas por distintos monarcas, los gastos de algunas familias reales siguen siendo exhorbitantes.

¿Quién consume más y quién es más discreto? ¿De dónde sale el dinero? El diario británico The Independent hizo una jugosa lista de las fortunas de las dinastías reinantes, aunque muchas de ellas se empeñen en ocultar lo que poseen.

Los holandeses, tan gastadores