LA ROYAL PERFECTA

Sin la presión de las obligaciones reales, pero con el estatus de ser nieta de la reina Isabel II, esta princesa por derecho es independiente, disfruta de un apasionante trabajo, un amor de cuento y de una maternidad que traerá nuevos aires a los Windsor en tiempos de crisis.

- SANDRA MENESES MORALES

La hija menor del polémico Andrés de York parece llamada a ser quien dé al mundo una imagen reno-vada de su familia: es una mujer casada sin escán-dalos, independiente, filántropa y a punto de ser madre. Y aunque fue criticada durante años por la prensa debido a su manera de vestir y hasta por su complexión robusta, como la de su mamá Sarah Ferguson, parece que la han dejado en paz y cada vez es más apreciada.

El termómetro para saberlo fue su boda en octubre de 2018, pues mucha gente salió a las calles de Windsor para celebrarla y, quizás, una de las razones haya sido que su enlace fue pagado con fondos privados (¡no podía ser de otra manera!) y no públicos. Un afecto también mostrado a su hermana Beatriz, cuya boda ocurrió en 2020 y quien recibió felicitaciones a través de cartas y redes sociales. “Gracias a todas las personas especiales y amables que se tomaron el tiempo de enviar mensajes increíblemente cariñosos y de apoyo”, expresó “Fergie”, su madre.

Estas muestras de afecto no son poca cosa al tomar en cuenta el escándalo en el que está envuelto su padre por su amistad con el empresario Jeffrey Epstein, acusado de abuso sexual y quien apareció muerto en su celda en 2019. Debido a esto, Andrés se retiró (o lo forzaron) de sus obligaciones reales en noviembre del mismo año, pero nada ha opacado a Eugenia, pues los británicos han sabido separar los asuntos vergonzosos de Andrés.