UN HOMENAJE A RARE

DESDE SUS PRIMEROS DÍAS COMO ULTIMATE HASTA SEA OF THIEVES, SU ÉXITO MÁS RECIENTE, RARE SIEMPRE HA CONSEGUIDO COMBINAR MECÁNICAS PRODIGIOSAS Y SENSACIONALES LOGROS TECNOLÓGICOS. REPASAMOS CADA ETAPA DE SU HISTORIA HABLANDO CON LOS GENIALES CREADORES DE SUS JUEGOS MÁS INOLVIDABLES.

- PAUL DRURY,

A unque podría decirse que la leyenda de Rare arrancó en los salones recreativos, su historia comenzó a ser relevante con la compañía Ultimate Play The Game. Creada en 1982 por Tim y Chris Stamper gracias al éxito logrado programando juegos para placas arcade, la mayoría de sus primeros títulos aparecieron en Spectrum aunque muchos se adaptaron para ejecutarse en otros ordenadores domésticos. A pesar de los buenos resultados que consiguieron Jetpac, Pssst y Cookie, fue Sabre Wulf y su combo de precio elevado, edición en caja grande y el fastuoso arte de portada obra de Tim Stamper lo que pronto destacó a Ultimate sobre su competencia.

Los Stamper no se rindieron cuando el mercado de los microordenadores dejó de ser productivo y apostaron por la consola Famicom (NES), utilizando ingeniería inversa con su hardware y logrando así un contrato con Nintendo de crear juegos para la máquina.

Conocida ya en aquel momento como Rare, la desarrolladora cosechó enorme éxito en aquella época trayendo al mundo un asombroso número de títulos para la sobremesa de 8 bits, y varias obras maestras para Game Boy.

A mediados de los noventa, Rare retomó las raíces arcade de los Stamper alcanzando también la gloria con SNES, lo que llevó a que Nintendo adquiriera gran parte de la compañía. Su toque de Midas continuó en Nintendo 64 cuando produjeron titulazos como el experimental Blast Corps, los plataformas Banjo-Kazooie y Conker's Bad Fur Day o la innovación hecha FPS con el dúo GoldenEye 007 y Perfect Dark.