Valencia – Fallas, patrimonio universal

Este 2017 las Fallas celebran por primera vez su inclusión en la Lista Representativa del Patrimonio Inmaterial de la Humanidad de la Unesco.

- Texto y fotos: Kris Ubach

Son quimeras de corcho. Elementos satíricos de tamaño monumental que arden ante la emoción popular todos los diecinueves de marzo. La fiesta de las Fallas es un ritual que se lleva a cabo en Valencia desde el siglo XVIII. Y desde mediados del siglo XIX también en Xàtiva, Sueca, Gandía, Torrent y Alzira, localidades pioneras de una tradición que con los años se extendería a unos 160 municipios valencianos más.

Empecemos por el elemento principal de esta fiesta que tiene tantos matices: el monumento fallero. Se cree que los pioneros de esta práctica fueron los miembros del Gremio de Carpinteros, quienes el día de San José –patrón de estos artesanos encendían una hoguera con el pairot, la estructura que sostenía los candiles en los talleres y que con la llegada del verano dejaba de ser necesaria. Con los años, a la pira se le fueron añadiendo trastos viejos y se vistió al pairot con ropajes y complementos con la intención de parodiar a algún personaje conocido. Así, nacía el primer ninot.

Hoy son las comisiones falleras las encargadas de organizar la fiesta en cada barrio y sufragar de su propio bolsillo la construcción del monumento fallero. Para ello se contrata a un mestre faller (‘maestro fallero’), quien diseñará la falla y sus ninots y trabajará durante 364 días junto con su equipo de ilustradores, escenógrafos, escultores,pintores, decoradores y carpinteros.